La vida está llena de ocupaciones. Nuestras agendas están cargadas de compromisos, actividades y tareas. Vivimos a las corridas, fácilmente nos distraemos y quedamos atrapados en las distracciones, inquietudes y problemas de la vida. Nos desenfocamos rápido de lo que realmente importa.
Hay una historia muy interesante en la Biblia que está al final del capítulo 2 del libro de Lucas.
Cuando Jesús tenía 12 años, María y José lo llevaron a Jerusalén para la fiesta de Pascuas según era la costumbre.
Al terminar la fiesta, María y José emprendieron viaje a su pueblo Nazareth “suponiendo” que Jesús estaba con ellos, pero Jesús se quedó en Jerusalén sin que sus padres se dieran cuenta. ¡Olvidaron a su hijo! La Biblia menciona que viajaron un día entero ¡sin darse cuenta que Jesús no estaba con ellos!
Después de 3 dias de buscarlo lo encontraron en el templo sentado junto a los maestros de la ley.
Esta historia me hizo pensar en las muchas veces que estamos tan ocupados en el camino de nuestra vida y olvidamos a Jesús. Olvidamos buscarlo, olvidamos su compañía y descuidamos su presencia muy fácilmente. Suponemos que el está con nosotros, asi como María y José, pero la verdad es que hace tiempo lo olvidamos por el camino; estamos tan ocupados en nuestros asuntos que descuidamos a Jesús.
Te animo a que cada día cuidemos la presencia de Dios en nuestras vidas. Anhelemos diariamente su compañía, busquemos su mano y caminemos con El, te aseguro que no hay nada más lindo que caminar con Jesús ❤
By Andru Franz
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